Yo sí he besado fotos, sí he bajado bragas, sí he jugado a ser binguero.
Qué difícil resulta olvidar algunos números de teléfono, qué difícil no marcarlos en mañanas soleadas de playa, qué extraña la erección cuando piensas que lo haces y lo haces sin pensar.
Yo sí he besado fotos, he enmarcado cuadrículas con bolígrafo azul, he llorado tinta, sudado lágrimas, cercenado la posibilidad de cerrar el círculo cuando sólo teníamos un cuadrado.
Yo sí he besado fotos. Quiero besar todas las fotos que olvidé en aquella casa. Quiero recordar cada instantes que perdimos, cada ola del mar, cada suspiro, cada polvo de cada madrugada.
Yo sí he besado fotos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario