miércoles, 30 de junio de 2010

AQUÍ, AHORA, ENFRENTE, ENCIMA, DEBAJO

Remordimientos, resaca del tiempo.
A veces la mejor medicina es la oscuridad de las persianas bajadas y la calma de la madrugada.

Cuando vengo casi siempre me convierto. El infierno se derrite, la política apesta, el color de las paredes se vuelve óxido.

El teléfono chirria desde bien temprano. La luz se cuela por las rendijas, el coche hace sonar su claxon dos veces seguidas, el verano ya ha llegado.

No tenemos tiempo para mirar atrás. Tampoco para recordar o imaginar lo olvidado.

Aquella batalla en el sofá fue la última, la perdí, pero eso ya es historia.

Aquí, ahora, enfrente, encima, debajo.

No hay comentarios: