AHÍ AFUERA

Ahí afuera hay alguien que canta, alguien que llama, alguien que divaga.
Cuando las teclas se aporrean juntas, cuando la brisa nos despierta, cuando llegas un minuto tarde pero yo te sigo esperando, sentado, ebrio, malogrado.

Ahí afuera hay alguien que espera, alguien que repasa, alguien que cuenta y navega.

Ahí afuera hay alguien que miente más que habla, alguien que corre sin tregua ni cuartel, ni ninguna guerra.

Cuando las tentaciones dejan un reguero de cerveza, cuando venimos desde hace tiempo advirtiendo que ya no somos ni siquiera mediocres, cuando ardemos en hogueras, cuando las hogueras son fiambreras de pan duro y pastillas para el dolor de cabeza.

Ahí afuera hay alguien que nos invita a pasar, ahí afuera hay alguien que nos desespera, alguien que huele el sexo a deshora, que tiembla por dentro y maldice por fuera.

Ahí afuera está el mundo, la niebla, el invierno.
Ahí afuera hay alguien que canta, ahí fuera está la deshonra, el camino sin flechas que indiquen la vuelta, ahí afuera no hay libros, ni sombras, ni siluetas.

Ahí afuera están las poetas, los surfistas, la mar en calma, el axioma prohibido de tú debajo, y yo, o cualquiera.

Ahí afuera vendo mi parte al mejor postor, cunde mi ejemplo, figuro en los créditos del cine a deshora, ahorco mi simpatía, lloro y nadie me oye, viajo, me arrepiento, sigo y persigo, cuento hasta diez antes de apretar el gatillo, vendo mi billete de tren, olvido tu nombre y cierro el grifo de mi calculadora.

Ahí afuera ahi alguien. Alguien que canta, alguien que susurra, alguien que sopla, alguien que camina a tientas, alguien que huye de no sabe qué certezas...