Vengo de sitios donde habitan maleantes, mendigos, escoria.
A veces tengo la sensación de que los entuertos son demasiados, nuestras manos débiles, el espíritu cobarde.
El domingo morirás. Para siempre.
Yo añoro la afonía, el desencanto, la tragedia.
A veces tengo la sensación de que la vida es una odisea, que el invierno es opaco y la historia, aunque duela, cíclica.
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